Ensaladilla de langostinos

Vamos a seguir aplacando esta caló con un plato fresquito, que podemos preparar con un día de antelación (sabe muuucho mejor, os lo aseguro) y que gusta a casi todos.
En mi familia triunfó siempre la ensaladilla de mi abuela, a la que no perdonábamos de ninguna manera su ensaladilla de gambas el día de Nochebuena.
Y yo, cada vez que me dejo caer por Sevilla, no dejo pasar la ocasión de pedir una tapa de ensaladilla en La Alicantina, con la gamba bien picadita.

langostino

Esta es una versión un poco tuneada, en la que sustituimos las gambas por langostinos (que resultan más económicos) y le damos un toque ligeramente picante añadiendo un poco de mostaza inglesa o wasabi.
También le añadiremos unos pepinillos agridulces bien picados (aunque se podría sustituir por aceituna picada o alcaparra, lo dejo a vuestra elección), que le dan el puntito definitivo.

Es un plato fácil de preparar y no lleva mucho tiempo.
Os recomiendo que no seáis vagos y os toméis la molestia de cocer la patata y la zanahoria, pelarlas y picarlas, a la manera tradicional y que evitéis usar las bolsas de ensaladilla congelada. Son 5 minutos más, pero merece la pena. Palabrita!!

ENSALADILLA DE LANGOSTINOS

Ingredientes (4 personas):

4 patatas medianas
2 zanahorias
4 huevos
1 lata bonito/atún en aceite
400 gr langostinos cocidos
2 pepinillos agridulces
Mayonesa ligera, especial para ensaladilla
1 cucharadita de wasabi o mostaza inglesa
15 ml leche
Sal

Lavamos las patatas, las zanahorias y los huevos y las ponemos a cocer en una cazuela cubiertas de agua.
Procuraremos que las patatas sean del mismo tamaño, para que cuezan uniformemente.
Mientras, pelamos los langostinos y los picamos.
Picamos también los pepinillos.
Cuando la patata este cocida, retiramos del fuego y escurrimos.
Dejamos enfriar un rato, hasta que estén templadas las patatas.
Pelamos las patatas, las zanahorias y los huevos (reservando uno para decorar al final) y lo picamos. Procurar que sea en trozos no muy grandes.
Lo ponemos todo en una fuente y salamos.
Añadimos el atún, los langostinos y los pepinillos picados y salamos muy ligeramente.

En un bol, mezclamos la mayonesa con el wasabi o la mostaza y añadimos el chorrito de leche.
El truquillo de la leche es para aligerar un poco más la mayonesa, para que luego impregne bien la ensaladilla y no quede demasiado pastosa. Pero sí no os convence mucho la idea, os lo podéis ahorrar.

Añadimos la mayonesa a las patatas y compañía y mezclamos bien, de modo que la mayonesa impregne toda la ensaladilla.
Rallamos el otro huevo duro por encima y … sí podemos aguantar, dejamos reposar unas horas antes de hincarle el diente.